Comprar un camión de segunda mano puede ser una gran oportunidad para ahorrar costes, pero también supone un riesgo elevado si no se realiza una revisión profesional previa.
En el transporte, un fallo mecánico no es solo un gasto de reparación: significa paradas no planificadas, pérdida de facturación y retrasos en las entregas.
🔎 Vicios ocultos: el gran peligro
Un camión aparentemente en buen estado puede esconder problemas que no se detectan a simple vista:
-
Sistema de frenos o suspensión en mal estado → un defecto grave que compromete la seguridad y puede costar hasta 6.000 € en reparaciones.
-
Problemas de motor o caja de cambios → un fallo en la culata o en la transmisión puede superar los 10.000 €.
-
Chasis dañado u oxidado → difícil de reparar y con impacto directo en la vida útil del vehículo.
-
Sistema eléctrico y electrónico → un mal diagnóstico previo puede llevar a reparaciones de entre 2.000 y 4.000 €.
💸 ¿Cuánto puede costar no revisar un camión?
Si compras sin revisar, el riesgo es alto:
-
Coste medio de reparaciones por vicios ocultos: entre 5.000 y 15.000 € en el primer año.
-
Pérdida por paradas de vehículo: un camión parado puede costar más de 1.000 € al día en ingresos no generados.
-
Valor de reventa reducido: un camión con averías pierde hasta un 20% de valor frente a uno en buen estado.
En total, una mala decisión puede suponer más de 20.000 € de coste adicional, además de los problemas operativos.
✅ Cómo evitar sorpresas
La solución es sencilla: antes de cerrar la compra, realizar una revisión profesional completa que incluya:
-
Diagnosis electrónica con equipos especializados.
-
Revisión de motor, transmisión, ejes, frenos y suspensión.
-
Inspección estructural de chasis y cabina.
-
Verificación de historial de mantenimientos y kilometraje real.
En Vervoer, nuestros técnicos especializados realizan este tipo de inspecciones en camiones y autobuses, asegurando que tu inversión sea segura y sin sobresaltos.